El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es un trastorno del neurodesarrollo que se inicia en edad infantil prevaleciendo hasta la edad adulta se caracteriza por un conjunto de comportamientos que indican déficit en los procesos atencionales (errores por descuido en tareas necesarias en la vida cotidiana, problemas en organizar actividades, dificultad en la concentración…) así como conductas de movimiento excesivo e impulsividad.
El TDAH tiene que ver con el autocontrol en general al ser unas afectaciones a nivel cerebral en la parte de las funciones ejecutivas del cerebro, el autocontrol de la atención y provoca por lo tanto déficit de atención. Si afecta también al control del movimiento provoca por lo tanto hiperactividad, al afecta el control de los impulsos y provoca en esta situación impulsividad y finalmente afectar el control de las emociones y provoca por lo tanto desregulación emocional todo esto con los diferentes componentes y las diferentes variantes de cada uno de estos cuatro.
SIGNOS Y SÍNTOMAS
Los signos y síntomas pueden aparecer de forma independiente entre ellos es decir a diferencia de otros trastornos con tener con uno de ellos se puede presentar en un nivel de intensidad completamente diferente y también de forma independiente presentaciones clínicas o fenotipo de pacientes síntomas dificultando muy especialmente en los adultos. En la parte clínica se conocen como criterios
diagnósticos basándonos en el DSM (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales actualmente DSM V-TR).
1.- INATENCIÓN.
Los síntomas no son sólo una manifestación del comportamiento de oposición, desafío, hostilidad o fracaso para comprender las tareas o instrucciones.
Seis (o más) de los siguientes síntomas se han mantenido durante al menos 6 meses en un grado que no concuerda con el nivel de desarrollo y que afecta directamente las actividades sociales y académicas/laborales:
- Con frecuencia falla en prestar la debida atención a los detalles o por descuido se cometen errores en las tareas escolares, en el trabajo o durante otras actividades (por ejemplo, se pasan por alto o se pierden detalles, el trabajo no se lleva a cabo con precisión).
- Con frecuencia tiene dificultades para mantener la atención en tareas o actividades recreativas (por ejemplo, tiene dificultad para mantener la atención en clases, conversaciones o lectura prolongada).
- Con frecuencia parece no escuchar cuando se le habla directamente (por ejemplo, parece tener la mente en otras cosas, incluso en ausencia de cualquier distracción aparente).
- Con frecuencia no sigue las instrucciones y no termina las tareas escolares, los quehaceres o los deberes laborales (por ejemplo, inicia tareas, pero se distrae rápidamente y se evade con facilidad).
- Con frecuencia tiene dificultad para organizar tareas y actividades (por ejemplo, dificultad para gestionar tareas secuenciales; dificultad para poner los materiales y pertenencias en orden; descuido y desorganización en el trabajo; mala gestión del tiempo; no cumple los plazos).
- Con frecuencia evita, le disgusta o se muestra poco entusiasta en iniciar tareas que requieren un esfuerzo mental sostenido (por ejemplo, tareas escolares o quehaceres domésticos; en adolescentes mayores y adultos, preparación de informes, completar formularios, revisar artículos largos).
- Con frecuencia pierde cosas necesarias para tareas o actividades (por ejemplo, materiales escolares, lápices, libros, instrumentos, billetero, llaves, papeles de trabajo, gafas, móvil).
- Con frecuencia se distrae con facilidad por estímulos externos (para adolescentes mayores y adultos, puede incluir pensamientos no relacionados).
- Con frecuencia olvida las actividades cotidianas (por ejemplo, hacer las tareas, hacer las diligencias; en adolescentes mayores y adultos, devolver las llamadas, pagar las facturas, acudir a las citas).
2.- HIPERACTIVIDAD Seis (o más) de los siguientes síntomas se han mantenido durante al menos 6 meses en un grado que no concuerda con el nivel de desarrollo y que afecta directamente las actividades sociales y académicas/laborales:
nota: los síntomas no son sólo una manifestación del comportamiento de oposición, desafío, hostilidad o fracaso para comprender las tareas o instrucciones. * para adolescentes mayores y adultos (a partir de 17 años de edad), se requiere un mínimo de 5 síntomas.
- Con frecuencia juguetea o golpea con las manos o los pies o se retuerce en el asiento.
- Con frecuencia se levanta en situaciones en que se espera que permanezca sentado (por ejemplo, se levanta en clase, en la oficina o en otro lugar de trabajo, en situaciones que requieren mantenerse en su lugar.
- Con frecuencia corretea o trepa en situaciones en las que no resulta apropiado. (nota: en adolescentes o adultos, puede limitarse a estar inquieto.).
- Con frecuencia es incapaz de jugar o de ocuparse tranquilamente en actividades recreativas
- Con frecuencia está `ocupado`, actuando como si `lo impulsara un motor` (por ejemplo, es incapaz de estar o se siente incómodo estando quieto durante un tiempo prolongado, como en restaurantes, reuniones; los otros pueden pensar que está intranquilo o que le resulta difícil seguirlos).
- Con frecuencia habla excesivamente.
3.- IMPULSIVIDAD
- Con frecuencia responde inesperadamente o antes de que se haya concluido una pregunta (por ejemplo, termina las frases de otros; no respeta el turno de conversación)
- Con frecuencia le es difícil esperar su turno (por ejemplo, mientras espera una cola).
- Con frecuencia interrumpe o se inmiscuye con otros (por ejemplo, se mete en las conversaciones, juegos o actividades; puede empezar a utilizar las cosas de otras personas sin esperar o recibir permiso; en adolescentes y adultos, puede inmiscuirse o adelantarse a lo que hacen los otros).
- Algunos síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivos estaban presentes antes de los 12 años.
- Varios síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivos están presentes en dos o más contextos (por ejemplo, en casa, en el colegio o el trabajo; con los amigos o familiares; en otras actividades).
- Existen pruebas claras de que los síntomas interfieren con el funcionamiento social, académico o laboral, o reducen la calidad de los mismos.
En función de los resultados se podrán clasificar las siguientes presentaciones:
Presentación combinada: si se cumplen el criterio a1 (inatención) y el criterio a2 (hiperactividad-impulsividad) durante los últimos 6 meses.
TIPOS DE TDAH
TDAH con presentación predominante con falta de atención. Es el tipo menos frecuente (aproximadamente un 10 % de los casos de TDAH diagnosticados) pero el más difícil de diagnosticar porque el componente hiperactivo es siempre más llamativo que el inatento. Las mujeres con TDAH tienen tendencia a presentar este subtipo.
TDAH con presentación predominante con hiperactividad e impulsividad. Este tipo corresponde aproximadamente al 30 % de los casos de TDAH diagnosticados. Su asociación a los trastornos de conducta hace que sea el tipo que más pronto llega a las consultas. Este tipo de TDAH es bastante más frecuente en los hombres (relación 4:1).
TDAH con presentación combinada. Es el tipo más frecuente, se da en casi el 60 % de las personas con TDAH. Es el tipo que más se relaciona con la comorbilidad con otros trastornos mentales como ansiedad y consumo de sustancias.
INTERVENCION:
Es importante resaltar que todas las personas hemos tenido algunos síntomas similares al trastorno por déficit de atención e hiperactividad en algún momento de sus vidas. El proceso de intervención para TDAH dependerá del tipo, del contexto y descaramiento de comorbilidades (cuando dos o más trastornos o enfermedades ocurren en una misma persona, al mismo tiempo o uno después del otro) es decir es necesario trabajar en conjunto sintomatologías de ansiedad o depresión y al mismo tiempo si el análisis funcional de la conducta refiere sintomatología TDAH se trabaja en conjunto.
Los tratamientos estándar del TDAH en adultos consisten en medicamentos, terapia psicológica para el entrenamiento y adiestramiento en la creación de rutinas y regulación emocional. A menudo, el tratamiento más eficaz comprende una combinación de estos elementos. Estos tratamientos pueden ayudar a controlar muchos síntomas del TDAH, pero no lo curan.
Medicamentos
Nota: los medicamentos tienen que ser recetados por psiquiatría especializado en TDAH
Los estimulantes, como los productos que contienen metilfenidato o anfetamina, suelen ser los medicamentos más comúnmente recetados para tratar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad.
Otros de los medicamentos usados para tratar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad son la atomoxetina no estimulante y ciertos antidepresivos como bupropión. La atomoxetina y los antidepresivos actúan con mayor lentitud que los estimulantes, pero pueden ser buenas opciones
Terapia Cognitiva conductual (TCC)
Nota : es importante acudir con expertos en el tema, actualmente solo existe esta terapia con evidencia científica y aprobada por APA (American Psychological Association)
Esta terapia estructurada enseña habilidades específicas para controlar la conducta y cambiar los patrones de pensamientos desadaptativos por patrones de pensamiento adaptativo. Puede ayudarte a lidiar con los desafíos de la vida, como los problemas en la escuela, el trabajo o las relaciones, y ayudarte a abordar otros trastornos mentales, como la depresión o el abuso de sustancias. Además, Las intervenciones psicológicas, especialmente, la terapia cognitivo-conductual (TCC) han demostrado una fuerte evidencia en torno a su eficacia en el abordaje del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y de los síntomas comórbidos y problemas asociados con el mismo (por ej., ansiedad y depresión) logrando una regulación integral..
MINDFULNESS COMO TERAPIA
El mindfulness se basa en la atención plena, lo que permite a las personas con TDAH focalizar su atención en lo que está sucediendo en el presente.
Las terapias de mindfulness para TDAH están resultando muy útiles para reducir los síntomas de la hiperactividad, obteniendo grandes beneficios para los pacientes con este tipo de trastorno.
El programa de tratamiento del TDAH adulto debería incluir:
- Psicoeducación a nivel personal, familiar y de entornos sociales cercanos, trabajo y escuela para lograr reestructuración en el ambiente
- Intervenciones Psicoterapéuticas
- Psicoterapia
- Psicoterapia Familiar
- Grupos de Apoyo
En Psicoterapia Integral Metepec (PIM) somos un grupo de terapeutas especializados en este y mas temas. Acércate a nosotros, estamos para ayudarte.
Psicoterapeuta Cognitivo Conductual y TCCMi
Psic. Edgar Guzmán Balderas
BIBLIOGRAFÍA
American Psychiatric Association (2014). Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), 5ª Ed. Madrid: Editoral Médica Panamericana.
American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and statistical manual of mental disorders (5th ed.). Washington, DC: Author.
American Psychiatric Association (2002). Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV-TR), 1ª Ed. Barcelona: Editoral MASSON.