La confianza es la clave del éxito en nuestro desarrollo personal, profesional o lo que queramos lograr en la vida, pero si dudamos en lograr lo que tenemos en mente, es probable que ni siquiera lo intentemos. Pensaremos que no seremos capaces de conseguirlo, y será mejor que nos rindamos.
El no tener confianza en uno mismo nos afecta en distintos escenarios en nuestra vida, dejando pasar grandes oportunidades por miedo de intentarlo. Es bueno mencionar que es algo transitorio, lo que quiere decir que no es para siempre y tenemos la opción de trabajar en nosotros mismos, una vez que logremos fortalecer nuestra seguridad de que tenemos las capacidades para conseguir lo que nos proponemos y así tu alrededor diga que no lo podrás lograr, seguiremos intentando hasta conseguir el objetivo.
Se preguntarán como mejorar la confianza de los niños en sí mismos, primero que nada, aceptarlos incondicionalmente tal y como son, para que ellos también comiencen a sentirse competentes para que pueda confiar en sus capacidades en que puede lograr lo que se propone, fortificando el tiempo de calidad con los niños en la interacción, construyendo momentos por medio de los juegos y muestras de afecto, porque de esa manera conoceremos nuestros hijos sus destrezas, aptitudes y cuáles son sus debilidades, de esa manera será más fácil criarlos. Si los padres están presentes los niños se sentirán seguros y protegidos, como beneficio su desenvolvimiento en diferentes contextos será con mayor confianza, evitando gritarles, etiquetando por características negativas o ejercer castigos físicos cuando los niños tengan iniciativa a una actividad nueva que quieran hacer y que a uno como adulto nos da miedo, porque ellos comenzaran a asociar con peligro el ejercer su independencia a situaciones nuevas y aprenderán que es mejor no exponerse a este tipo de escenarios, y comenzara a afectarle a nivel emocional, manifestando circunstancias de frustración, miedo y rechazo a cosas nuevas para evitar la crítica.
El sobreproteger a los menores no ayudará para que se sientan competentes para realizar determinadas actividades, como el cumplir por ellos acciones que por si solos si pueden ejecutar porque no estimulamos a que fortalezcan sus destrezas y habilidades, animándolos a que practiquen para mejorar a superar sus dificultades y talentos, alentándolos por dar lo mejor y más allá del resultado.
Si queremos niños seguros de sí mismos hay que enseñarles que los errores son oportunidades para aprender, permitiendo que se equivoquen y que ellos mismos busquen nuevas soluciones, siendo para ellos un modelo a seguir.
En el consultorio de psicoterapia integral se les brindará el apoyo en un sano proceso psicoterapéutico para fortalecer la confianza en sí mismos y de los menores.
Mtra. Erika Servín M.