Las emociones cumplen un papel sumamente importante en la vida de cada persona, desafortunadamente somos muy pocos los adultos que sabemos regularnos, en nuestra infancia muchas veces nos encontramos con invalidación y represión de emociones, la idea aquí no es culpar a nuestros padres, pues ellos a su vez recibieron muy poca, por no decir nula educación emocional, decir esto no es para justificar de ninguna manera nuestro actuar como adultos, sino más bien para sensibilizarnos con la forma en que fuimos aprendiendo de nuestras emociones.

Ahora veamos las principales funciones que cumplen las emociones:

Conocimiento: en primer lugar, las emociones son un indicador de lo que nuestro cuerpo necesita, en qué condición nos encontramos y esto a su vez nos permite observar un panorama de lo que se requiere para volver a un estado de tranquilidad. Sin embargo, en muchas ocasiones las personas estamos tan enajenadas de lo que sucede en nuestro propio cuerpo que las emociones no son percibidas y al dejarlas de lado se generan malestares mayores, tal es el caso de dolores de cabeza frecuentes, dolores estomacales, insomnio, dermatitis atópica, entre otras.
Motivación: las emociones nos permiten tener un impulso para realizar otras acciones que nos lleven a suplir o satisfacer una necesidad, por ello es tan importante el punto de conocernos o ser capaces de identificar cuál es la emoción que esta surgiendo, para continuar identificando qué es lo que se requiere realizar.
Adaptación: otro punto que se realiza con las emociones es la adaptación, pues cada una de ellas va a surgir dependiendo del contexto y la necesidad personal que surja, de esta manera debemos comprender que las emociones no son “negativas” sino todo lo contrario, su función es la de encontrar nuestro equilibrio, por lo que debemos darnos la oportunidad de experimentarlas, así también es importante observar de qué manera hemos aprendido a expresarlas pues ese punto si se debe estar trabajando y modificando si notamos que no es de una manera sana ya que nos ha traído consecuencias negativas para nosotros mismos o para las personas que nos rodean.

Ahora conozcamos un poco sobre las emociones básicas; en este caso nos enfocaremos en tristeza, alegría, miedo y enojo.

Tristeza: esta es una de las emociones que más nos negamos en sentir, pues para la mayoría de los adultos es considerada como “poco útil” sin embargo, esta emoción tiene como función validar nuestro dolor y la auto consolación, lo cual es muy importante pues en ocasiones pensamos en el dolor como algo por lo cual competir, es decir, pensamos que determinados motivos son más validos que otros, cuando la idea es que sin importar cuál sea la razón de la tristeza, se le dé la validez suficiente.

Alegría: esta emoción es en muchas ocasiones la única que consideramos como valida expresar, las redes sociales nos han llevado a pensar que en todo momento debemos estar alegres y en las condiciones óptimas, lo cual no es así. Esta emoción nos permite disfrutar de lo que vivimos y nos motiva a seguir adelante.

Miedo: en muchas ocasiones concebimos a esta emoción como signo de debilidad, sin embargo, la función de ella es de suma importancia pues nos ayuda a ser precavidos y a protegernos de los peligros, en caso de que no existiera, imagina el peligro que correríamos pues no habría un instinto de cuidado, sino que realizaríamos las cosas sin el mínimo de precaución.

Enojo: esta es otra de las emociones que se consideran negativas pues es cierto que la manera en que se expresa puede llegar a ser hostil o incluso peligrosa para la misma persona que lo esta experimentando o para quienes se encuentran alrededor de ellos. La función principal es defender nuestros derechos, poner límites y enfrentar obstáculos, así que nuevamente, experimentar esta emoción no es negativo, pero es importante identificar de qué manera la expresamos.

Es importante recalcar que, así como la vida misma va cambiando, no podemos quedarnos en una sola emoción todo el tiempo, de hecho, eso no es sano, por el contrario, las personas vamos experimentando y transitando por diferentes emociones, incluso en un mismo día. Sentir esta bien, es sano y nos ayuda a adaptarnos pues nos permite movilizarnos a un estado de mayor tranquilidad.

Si tu o alguien que conoces crees que tiene dificultades para expresar de forma sana sus emociones, acércate a Psicoterapia Integral Metepec en donde encontraras un grupo de profesionales de la salud mental que te acompañaran en este proceso.

Psic. Yarizeth Pino