Al hablar de noviazgos juveniles en la actualidad, no podemos negar que día a día estamos tan expuestos a una realidad diferente a la que nosotros crecimos, por lo tanto las reglas de la sociedad cambian drásticamente, entre medios de comunicación, escuela y vecinos, nuestros hijos están expuestos a tanto estímulo y corrientes ideológicas.
El temprano erotismo viene desde la música, los programas o vídeos que están bombardeando todo el tiempo a los menores. Aunado a esta necesidad apresurada de crecer y ser más adultos que infantes.
El reto es como están inmersos con sus iguales tratando de encajar o encontrar una identidad.
Siendo así las relaciones interpersonales la prioridad de los menores, ¿cuál sería entonces el momento oportuno en el que tienen permitido iniciar su vida romántica?, ¿realmente tienen la madurez para enfrentarlo o necesitan estas relaciones para “madurar”?
Vamos a partir del punto en el que por imitación tratan de replicar lo que ven en casa o en sus círculos inmediatos, desde allí partimos a analizar si es el ambiente más adecuado y sano, puede ser que se busca desde la corta edad lo que no se tiene en casa, como por ejemplo atención, cariño o visibilidad y esto desemboca en una necesidad/vacío que se quiere satisfacer a corta edad.
Otro punto importante es que si desde edad temprana sufrieron abuso es muy probable que al estar ya inmersos y adelantados en ese mundo continúen teniendo prácticas sexuales, siendo este un foco de alerta al que tenemos que prestar atención.
Desafortunadamente pareciera que cada vez más es más corta la edad en la que se inicia, sin embargo depende del entendimiento y madurez de cada joven, no debemos presionar preguntándole constantemente si ya tiene “noviecit@” a edad muy corta o que si le gusta alguien, son etapas en las cuales no están interesados y no saben realmente lo que significa.
La clave es respetar cada etapa e inculcar el respeto, a sí mismo y a los iguales. La comunicación es clave, un ambiente lleno de confianza y unión, sin tapujos ni tabúes.
Caer en las prohibiciones o limitaciones extremas puede alejar y salir contraproducente, pues termina a escondidas haciendo las cosas los jóvenes, claro que ellos buscan información y orientación sobre lo que les pasa, es preferible que con alguien de confianza como los padres o profesionales se haga, actualmente pueden estar expuestos al internet o “amigos”.
Las interacciones dependen mucho del contexto social, influye la forma de pensar de esa sociedad a la que están expuestos, hay lugares donde no se ambiciona a más que casarse y tener familia, donde está bien visto iniciar este ciclo con anticipación y hasta “robarse” a la novia a edad temprana, esto más que decir si está “bien o mal” es un punto de comparativa de a dónde vamos y qué queremos que tengan como metas. Enseñarles que se puede involucrar con sus iguales emocionalmente sin llegar necesariamente a cuestiones físicas o eróticas, cuidar el contenido que consume pero sobre todo las personas de las que se rodean, pues toda esta información será clave.
Los menores deben conocer su cuerpo, sabiendo dónde inicia su privacidad y recalcando los límites para las otras personas, entendiendo que hay una edad para todo y siendo responsables de sí mismos.
Para orientar sobre sexualidad es nuestro deber como tutores conocer sobre los temas para saber abordarlos, debemos investigar y acercarnos a profesionales de la materia para no errar o confundir más de lo que podamos ayudar, en Psicoterapia Integral Metepec se atiende desde los infantes a los adultos sobre estos temas tan esenciales para nuestra sociedad, no esperes a que sea demasiado tarde es mejor prevenir responsablemente.
Mtro. César Luna