Muchas veces creemos que al decir SI a todo lo que nuestros hijos piden estamos cubriendo las necesidades que ellos tienen, esto muchas veces se da por dos motivos, porque así fuimos enseñados; o porque como hijos pasamos necesidades que no nos gustaría que ellos pasaran. Pero llega un momento en la vida de todo padre en el cual se tiene que decir NO y resulta que ahí es cuando se nos complican las cosas ya que acostumbramos a nuestros hijos a obtener todo sin conocer responsabilidades.
La palabra límite en este caso hace referencia al marcar y especificar de forma emocional donde termina una persona y donde empieza la otra. Es decir el enseñar a nuestros hijos cuales son las responsabilidades de ellos como persona y las responsabilidades de los demás.
Un punto importante a aclarar es que no nacemos con límites, estos tienen un proceso de enseñanza-aprendizaje en el cual los adultos somos responsables de transmitir por medio de acciones y comunicación cuáles son esas responsabilidades que se tienen como hijo y de este modo construir desde adentro a la persona.
- ¿Para qué sirve plantear límites claros en nuestros hijos?
- Hay un mejor funcionamiento familiar.
- Se estimula la autonomía y el desarrollo personal.
- Se desarrolla un sentido de pertenencia.
- Los miembros de la familia pueden llevar a cabo sus funciones de una forma específica.
- Se brinda un ambiente de seguridad, entre otros.
- Algunas de las estrategias que se pueden utilizar para plantear límites claros son:
- Establecer reglas sin caer en el de autoritarismo, ya que estas nos ayudan como ejercicio de fortalecimiento emocional en los niños. Estas deben ser concisas y reforzadas periódicamente.
- Evitar errores en la comunicación, es decir debemos evitar plantear las quejas como preguntas, ejemplo; ¿Cuántas veces te tengo que decir que..? ya que resulta poco eficiente para que el niño realice la acción. Se debe ser concreto con lo que se quiere decir.
- Ser firmes con lo establecido, no negociar el NO.
- Se puede negociar el SI, por ejemplo si se permite ver la tele se puede negociar la hora y el programa a ver.
- Los límites deben reforzarse de manera positiva.
Una familia funcional se diferencia de otra disfuncional en el manejo que hace de sus conflictos, no en la presencia o ausencia de estos.
Salvador Minuchin
Por MTF. Alicia García.