Como padres necesitamos comprender que la crianza como equipo, incluso estando separados es indispensable por el bien de nuestros hijos, que son quienes viven de forma directa la consecuencia de nuestras decisiones y relaciones como padres.
La crianza es el conjunto de comportamientos, actos, pensamientos y sentimientos que los padres o tutores ejercen para educar y brindar los cuidados necesarios a los infantes bajo su responsabilidad. La crianza como equipo puede ser una tarea compleja, que se facilita si los padres logran educar por medio de pautas consensuadas, con disciplina y límites, de esta forma se favorece el que los niños crezcan emocionalmente estables, se sientan más felices, seguros de sí mismos, amados y con confianza en su núcleo familiar.
Al momento de querer educar a los hijos es común encontrar diferencias en la pareja, porque no se fue educado bajo las mismas creencias, reglas, valores, principios, limites. Como la educación y disciplina fue distinta para cada padre, se generan diferentes ideas y formas en la que cada uno concibe o espera poder educar a sus hijos, lo que puede llegar a afectar en su crianza, provocando discusiones que generan en el niño, confusión, problemas de comportamiento, inseguridad, pueden llegar a sentirse solos emocionalmente y con falta de confianza.
Para poder ejercer una crianza competente es primordial la comunicación entre la pareja, dialogar y escuchar las necesidades que uno percibe, es conveniente en ciertos casos, ser flexible y estar dispuestos a compaginar con el estilo de crianza de la otra persona, siempre y cuando no se vulneren la integridad, seguridad, valores y derechos del niño, es deseable que ambos padres tomen decisiones en común para el bienestar de los menores. Bajo límites saludables, debe respaldarse la autoridad de ambos padres, las acciones y decisiones en conjunto son importantes, cada uno aporta diferentes cualidades, por lo tanto, los menores necesitan que haya consistencia, coherencia y una relación cordial entre los padres.
¿Podemos seguir siendo equipo si estamos separados? La respuesta es sí.
El estar separados no implica que la educación de los menores se quede a cargo solamente de quien está la mayor parte del tiempo con ellos. Recordemos que la responsabilidad paterna sigue siendo mutua, la separación o divorcio de los padres no significa que deban permitirse estar en una constante competencia por el cariño del menor; es importante que los niños vivan con limites congruentes marcados por ambos padres, que se evite caer en darles todo lo que quieran, el amor no debe conseguirse por medio de regalos y caprichos, la mejor forma de continuar educándolos es siendo padres presentes, dándoles cariño, tiempo, atención, paciencia y buen ejemplo.
Seamos conscientes de que esa persona que un día elegimos para ser el padre o la madre de nuestros hijos, probablemente tienen la misma capacidad y las herramientas para atenderlos y cuidarlos como nosotros. Sus métodos o su estilo de crianza no es igual que el nuestro y también es válido. Dejemos de lado la idea que solamente nuestro punto de vista y formas para educar correctamente son válidas, porque no es cierto, cada uno aporta de forma distinta y natural, al igual que nosotros habrá cosas que haga bien y cometerá errores, por ello la importancia de criar como equipo, sumar las habilidades de cada uno y complementarse para crear la mejor para sus hijos.
Estando en pareja o separados, encuentren la forma de trabajar en equipo con respecto a la crianza de sus hijos, sean aliados, apóyense y lleguen a acuerdos sin afectar a terceras personas. Tomen decisiones en conjunto, influyan positivamente, fortalezcan la relación entre todos. Los padres, somos modelos para nuestros hijos, ellos aprenden de nosotros, imitan la forma de relacionarse, comunicarse y gestionar sus emociones. Dediquemos tiempo, amor y responsabilidad compartida en nuestros hijos.
En Psicoterapia Integral Metepec podemos ayudarles a mejorar las habilidades de crianza compartida para el bienestar de sus hijos, aún, si se encuentran separados.
Mtra. Erika Gpe. Servín Márquez.